POTENCIA CERTIFICADA

El término "usado certificado" o CPO (Certified Pre-Owned) hace referencia a un vehículo que puede haber tenido un propietario anterior, pero que desde entonces ha sido sometido a una inspección exhaustiva y a una revisión de seguridad por parte de un técnico capacitado y autorizado en un concesionario.

Los vehículos usados certificados marca Dodge ​​​​​​han aprobado una minuciosa inspección de 125 puntos y una revisión de seguridad, y cuentan con un informe del historial del vehículo verificado. El vehículo debe aprobar todo el proceso de certificación para que se lo pueda catalogar como un CPOV de Dodge.

Los concesionarios no ofrecen programas de alquiler para los CPOV de Dodge, pero puedes conseguir financiación para ayudarte con el precio de compra de un CPOV.

Los vehículos usados certificados marca Dodge ​​​​​​han aprobado una minuciosa inspección de 125 puntos y una revisión de seguridad, y cuentan con un informe del historial del vehículo verificado. El vehículo debe aprobar todo el proceso de certificación para que se lo pueda catalogar como un CPOV de Dodge.

Los vehículos usados certificados de Dodge incluyen una garantía limitada de 3 meses/3,000 millas de Máximum Care. que cubre más de 5,000 componentes del vehículo, con un deducible para el cliente de $100 para las visitas de reparación cubiertas.

Los vehículos usados certificados ofrecen las mismas garantías que si compraras un vehículo nuevo, pero en un paquete más asequible. Sin embargo, si deseas tener el último modelo o buscas acabados o paquetes de opciones muy específicos, puede que te convenga más comprarlo nuevo.

Cuando compras un vehículo usado certificado de Dodge a través de un concesionario, obtienes los beneficios de la garantía Dodge y la seguridad de que el vehículo supera nuestro estricto proceso de certificación, algo que la compra privada no garantiza.

Los vehículos usados certificados son una alternativa asequible a los vehículos nuevos, ya que se inspeccionan en fábrica y se encuentran en buen estado. Suelen tener poco uso, poco rodaje y muy poco desgaste.

Es difícil determinar un valor agregado específico por la certificación, aunque hay mucho que decir acerca de la tranquilidad de saber que su vehículo se sometió a una inspección y certificación minuciosas. Además, los vehículos CPO vienen con una garantía del OEM, respaldada por el equipo que mejor conoce su vehículo.

Un vehículo usado certificado puede considerarse como un vehículo 'usado', pero que cuenta con el respaldo del fabricante. Sin embargo, cuando optas por un vehículo CPO, tienes la seguridad de que fue específicamente seleccionado para participar en el programa y cuidadosamente inspeccionado y certificado para cumplir con nuestros altos estándares.

Puedes negociar con tu concesionario la compra de un auto o SUV usado certificado y también puedes hablar con el concesionario sobre opciones de canje y financiación para que tu compra sea más asequible.

Debes tomar nota de las piezas del vehículo que están cubiertas por la garantía. Consulta el historial del vehículo para asegurarte de que estás de acuerdo con los incidentes que pueda haber sufrido. Comprueba tus opciones de financiación y asegúrate de que entiendes las condiciones del acuerdo que vas a firmar.

Elegir un vehículo usado certificado en comparación con un vehículo usado es una decisión personal. Los vehículos que no pasan el proceso de inspección no cumplen con las condiciones para que se los ofrezca como vehículos CPO, de manera que los vehículos usados certificados (CPO, por sus siglas en inglés) ofrecen practicidad y tranquilidad. Incluso después de la compra, quienes adquieran vehículos CPO se beneficiarán de la garantía limitada con respaldo de fábrica. y más.